Con el fallecimiento de Pedro el Perro Aguayo, a causa de un paro cardiaco, el pancracio mexicano perdió a uno de sus “mayores símbolos, al luchador más grande de toda la historia, tanto rudo como técnico”, afirmó Jesús Reyes, mejor conocido como Máscara Año 2000, quien perdió su emblemática tapa a manos del Can de Nochistlán en una cruenta batalla efectuada el 30 de abril de 1993 en la Plaza México.
“Su muerte es algo fuerte y bastante dolorosa para mí. Hablar del Perro es hacerlo de uno de los señorones de la lucha libre, de todo un ejemplo para las nuevas generaciones”, aseguró el integrante del legendario Trío Dinamita, con el que el oriundo de Zacatecas tuvo una gran rivalidad.
Destacó que Aguayo fue su “peor, o más bien dicho, mi mejor rival y también mi mejor amigo, tuvimos una amistad desde que yo empecé en la lucha libre, lo quise mucho y lo voy a querer toda la vida”.